La Unión Europea ya se prepara para imponer fuertes aranceles de importación a los vehículos eléctricos fabricados en China.

Imagen: VW

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El Salón del Automóvil de París tuvo un lunes tenso por la participación de fabricantes chinos y europeos,reportaron agencias de noticias desde la capital francesa.

Y es que la Unión Europea (UE) ya se prepara para imponer fuertes aranceles de importación a los vehículos eléctricos fabricados en China,mientras que la industria europea se enfrenta a una disminución en la demanda de coches.

De acuerdo con la agencia de noticias Reuters,el consejero delegado de Stellantis,Carlos Tavares,advirtió que los aranceles llevarían a los fabricantes de automóviles chinos a establecer plantas en Europa,lo que aumentaría el exceso de capacidad en la región y llevaría a algunos fabricantes locales a cerrar fábricas.

Por otro lado,Serge Gachot,director general del Salón del Automóvil de París,indicó que nueve marcas chinas,entre ellas BYD y Leapmotor,presentarán sus últimos modelos en el evento de este año. Es la misma cifra que en 2022,cuando representaban casi la mitad de las marcas presentes.

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Stella Li,vicepresidenta ejecutiva de la china BYD,dijo que en caso de imponer aranceles,afectará principalmente a los usuarios.

“¿Quién paga la factura? Los consumidores. Esto preocupa mucho a la gente. Impedirá que los más pobres compren”,afirmó a Reuters Stella Li.

A principios de este mes,los Estados miembros de la UE respaldaron por un estrecho margen la imposición de aranceles de importación de hasta el 45 por ciento a los vehículos eléctricos fabricados en China,ello con el objetivo de contrarrestar lo que Bruselas califica de subsidios injustos de Pekín a los fabricantes chinos. Pekín niega que exista competencia desleal y ha amenazado con tomar contramedidas.

Aunque los fabricantes de automóviles chinos han criticado la medida de la UE,siguen adelante con sus planes de expansión europea y hasta ahora ninguno ha dicho que aumentará los precios para cubrir los aranceles.

Los fabricantes chinos de vehículos eléctricos,como BYD,han fijado hasta ahora un precio ligeramente inferior al de sus rivales europeos,lo que les da una ventaja que también ayudará a compensar los menores márgenes en el país.

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También lo han hecho fabricantes de automóviles japoneses y surcoreanos que los precedieron,pues están promocionando un mejor equipamiento y ofreciendo más funciones de serie.

“Mi opinión es que alcanzaremos la paridad de precios en Europa en dos o tres años. Si queremos competir,tenemos que trabajar duro para conseguir ese objetivo”,afirmó el director ejecutivo de Leapmotor International,Tianshu Xin.

Las ventas de vehículos de pasajeros en China aumentaron 4.3 por ciento en septiembre,respecto al mismo mes del año anterior,rompiendo así cinco meses de caídas gracias al impulso de un subsidio gubernamental para alentar los canjes como parte de un paquete de estímulo más amplio. Las ventas en Europa alcanzaron su nivel más bajo en tres años en agosto.

En otro golpe para el mercado de vehículos eléctricos,el gobierno francés dijo la semana pasada que reduciría su apoyo a los compradores de vehículos eléctricos,uniéndose a Alemania,que puso fin a su plan de subsidios a fines del año pasado.